En ese sentido, el subdirector de Recursos Naturales, Horacio Quinteros, presentó un informe donde se recomienda no bañarse en zonas no habilitadas y que no cuentan con guardavidas preparados para accionar en situaciones como la mencionada.
Los ataques tienen que ver con la presencia de bañistas en zonas afectadas por la bajante del río, el agua calma y con alta temperatura; hábitat propicio para estos peces.
Es importante destacar que estas situaciones son fenómenos naturales, en ningún punto se debe a alteraciones eco sistémicas en el ambiente fuvial-ribereño.
Por tal motivo, se recomienda:
• Utilizar zonas donde existan guardavidas, respetar sus indicaciones y acudir a ellos en caso de ataques.
• En caso de sufrir una mordedura, desalojar la zona inmediatamente y recurrir a un centro médico para su atención.
• Evitar zonas de aguas quietas y playas, que en días de calor levantan temperatura fácilmente.
• No bañarse en playas cercanas a lugares en donde los pescadores limpian sus presas o arrojan los restos de las carnadas utilizadas.
• No meterse al agua con lastimaduras.