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La provincia brindó en Rosario una jornada de capacitación en Comunicación Crítica

Organizada por el Ministerio de Salud, estuvo destinada a profesionales de la salud con el objetivo de mejorar los protocolos y su relación con la población en el abordaje de situaciones que revisten complejidad.

Profesionales del Ministerio de Salud se dirigen al auditorio durante la jornada de capacitación en Comunicación Crítica.

El Ministerio de Salud, a través del Centro Único de Ablación e Implante de Organos (Cudaio), realizó este miércoles en Rosario una jornada taller de capacitación y entrenamiento en Comunicación Crítica, con el objetivo de reforzar la estrategia comunicacional y mejorar los protocolos médicos de los mismos con la población, a la hora de abordar situaciones de complejidad.

La jornada se llevó a cabo en el salón de usos múltiples ubicado en el centro de la Plaza Cívica, en la delegación Rosario del gobierno provincial, y contó con la participación de médicos, enfermeros, psicólogos, personal de portería e integrantes de vigilancia, entre otros trabajadores provenientes de los hospitales Agudo Ávila y Centenario de Rosario; Anselmo Gámen de Villa Gobernador Gálvez; y miembros del Sistema Integrado de Emergencias Sanitarias (SIES 107) de Rosario y la región.

La actividad fue cumplida por un plantel profesional interdisciplinario de la cartera sanitaria, conformado por Alejandra Rigalli, Mariana Belotti, Paula Raviola, Natalia Piedarabuena y Natalia Giusiani quienes conversaron con los participantes apelando a un modo de aprendizaje que se genera a través del acercamiento a los problemas cotidianos del asistente para construir nuevas herramientas de comunicación, basadas en propias experiencias laborales y sus percepciones cotidianas, que ayuden a fortalecer la comunicación entre el personal sanitario y el paciente y sus familiares.

Ante el interrogante de por qué es difícil dar una mala noticia o algunos hechos de gravedad en salud, Belotti explicó que en toda relación humana “existe una carga subjetiva y casi siempre sucede una identificación o proyección con los miedos y el dolor de otro. Dado que a todo trabajador de salud nos resulta cercano situarnos en el lugar de otro, vemos eso como una actitud positiva. Si aconteciera lo contrario perderíamos la capacidad humana de comprender. En el ámbito laboral de los organismos de salud, ninguno de sus integrantes deberíamos perder la capacidad de auxiliar y solidarizarnos con lo que le sucede a otro, dado que eso da sentido a nuestra labor cotidiana”, agregó.

Además calificó al escenario como difícil porque “puede desencadenar una crisis (inevitable) con la idea de considerar que no podremos manejarla, por la incertidumbre en el que comunica, por lo difícil que es el manejo de las emociones, por el sentimiento de culpa que genera y por el temor a provocar daño con reacciones inmanejables e inesperadas”, amplió.

IMPORTANCIA DE LA COMUNICACIÓN EN SALUD
Rigalli, teniendo en cuenta los parámetros que deben ser considerados por parte del trabajador de la salud con respecto al paciente, dejó en claro “la importancia de la buena comunicación en salud, sea en un efector primario de salud, hospital, o en otro espacio más complejo”.

Precisó que “mantener una buena comunicación en salud es parte importante del proceso terapéutico porque facilita el registro de la realidad, mejora la relación con los pacientes, previene el duelo patológico, facilita la adherencia a indicaciones, disminuye la posibilidad de conflictos y /o juicios y facilita el trabajo cotidiano”.

INFORMAR EL CÓMO ES MEJOR QUE EL QUÉ
Respecto de dos interrogantes básicos de la comunicación: cómo o qué notificar, las expositoras coincidieron en manifestar que para que sea más efectivo debe sobresalir el cómo informar. “El cómo siempre es más relevante que el cuestionamiento sobre qué informar”, aseguró la profesional.

De igual modo, agregó que lo que importa es “cómo se brindan las explicaciones de lo que acontece, además de saber utilizar un tono adecuado de la voz, y de tener en cuenta los aspectos de la comunicación no verbal como la mirada, los gestos, la postura del cuerpo con las manos a la vista y quietas. estableciendo una conversación cálida con el otro para poder generar empatía, confianza y una escucha activa”.

Los tips principales que se manejaron en el taller incluyeron “comunicarse con mensajes cortos, directos, sencillos, claros, de manera respetuosa, con un código adecuado, siempre en primera persona (yo, nosotros) y tales recomendaciones se extienden hacia el propio equipo que integra, hacia la organización, hacia la comunidad, hacia el paciente y hacia la familia de la persona en problemas”.

Raviola sostuvo que “no hay buenas o malas noticias: solamente existe la posibilidad de concretar una comunicación efectiva con el otro o no hacerlo”, remarcando que “somos seres emocionales y, por tanto, de modo inexorable debemos aprender a conectarnos con las emociones y los sentimientos del otro”.

Sobre la amplitud de la comunicación y el mundo de sus intrincadas relaciones, dijo que si bien “es cierto que la responsabilidad principal de comunicar cuestiones determinadas del paciente es del médico, también es responsabilidad de todos los integrantes del sistema de salud desde que el paciente ingresa al efector”, por lo que hacemos hincapié en la importancia de cada uno del equipo de salud, desde el admisionista que determinará cuándo darle un turno para poderse asistir hasta el médico que atenderá la problemática del paciente”.

En ese sentido, Piedrabuena enfatizó que “debemos cuidarnos entre todos y para que ello ocurra hay que aumentar una buena conexión interpersonal en los equipos, ya que hoy nadie está exento de vivir una situación violenta. Por eso hay que aprender a ayudar a que el personal de salud entienda cómo leer los contextos y anticiparse a lo que puede suceder para evitar complicaciones que puedan desencadenar en consecuencias mayores”.

DESAFÍAR EL ESTRÉS PARA CONSTRUIR
Las expositoras insistieron en argumentar que los miembros del equipo de salud amortiguan mejor el propio estrés y cumplen con sus objetivos cuando cuentan con más conocimientos y habilidades comunicacionales adecuadas.

“Generar mayores competencias le permite al profesional de la salud recabar y brindar información fidedigna y vincularse de manera más cercana con el paciente, su familia y sus propios compañeros, redundando en un tipo de asistencia mejor para el paciente, y además en el trato interpersonal con los demás integrantes del equipo”, señaló Rigalli.

EL PARADIGMA: FORTALECER LA COMUNICACIÓN
Acerca de fortalecer la comunicación como Paradigma, Belotti destacó que la actividad “la construimos entre todos y tiene como objetivo mejorar la comunicación integral dentro de los efectores de la Red de Salud provincial".

Como cierre, afirmó que “el diálogo es uno de los aspectos que la provincia refuerza permanentemente considerándose desde el Ministerio de Salud que es una herramienta de enorme utilidad también para descomprimir situaciones en las cuales, amigos y familiares, se reúnen en la guardia a la espera del diagnóstico”.

CRONOGRAMA
En la actualidad coexisten dos tipos de talleres: uno que es el de entrenamiento en comunicación crítica en salud, del que participan distintos integrantes del sistema de salud, que hemos realizado en las ciudades de Santa Fe, Rosario, y Venado Tuerto; y otro que se establece en torno a las relaciones interpersonales en salud y comunicaciones efectivas que se halla en proceso y del que se hicieron dos en San Lorenzo y Barrancas.

Los talleres de Comunicación Crítica continuarán este viernes en la ciudad de Rafaela, y el próximo 27 en el hospital de Venado Tuerto. En tanto, y sin fecha confirmada se concretará otro en la ciudad de Reconquista.

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