El gobierno de la provincia realizará la apertura de sobres con las ofertas económicas para la adquisición de 4500 tubos de tecnología LED que reemplazarán a los actuales fluorescentes convencionales ubicados en el interior del Túnel Subfluvial “Raúl Uranga-Carlos Silvestre Begnis”.
La ceremonia se llevará a cabo este martes a las 10 horas en la sala de reuniones del Peaje Paraná, y será presidida por los directores de la Comisión Administradora: Pablo Serra Menghi y Juan José Martínez. El presupuesto oficial asciende a $ 2.900.000.
En la actualidad, el viaducto cuenta con 4200 tubos fluorescentes que demandan un consumo energético unitario de 36 watts, sin tener en cuenta diversos componentes del artefacto, como balastro y cebador.
La iluminación interior del túnel se mantiene en funcionamiento todo el día y representa una demanda de energía considerable, que alcanza el 34 % del total de la que requiere el complejo vial para el desempeño de todas sus áreas.
La incorporación de la nueva tecnología LED (diodo emisor de luz por sus siglas en inglés), cuyo consumo máximo establecido según pliegos podrá ser de hasta 20 watts, logrará economizar entre un 50 y un 60 % de energía.
PROGRAMA DE MEJORAS Y PUESTA EN VALOR
“Se trata de una obra que se realizará en el marco del Programa de Mejoras y Puesta en Valor que, a través del Ente, llevan adelante las provincias de Santa Fe y de Entre Ríos con el objetivo de modernizar este enlace vial único en Latinoamérica y estratégico en la región Centro de nuestro país”, destacó Juan José Martínez, director entrerriano del Túnel Subfluvial.
El representante santafesino en tanto, Pablo Serra Menghi, valoró el impulso dado al proyecto y señaló que el mismo “se fundamenta en un estudio de factibilidad técnico-económica desarrollado por la Universidad Tecnológica Nacional Regional Santa Fe (UTN), que fue complementado por los profesionales especializados del Ente”.
Además de la importancia de la iniciativa en lo que respecta a tareas de mantenimiento dentro del viaducto, la luminaria de tecnología LED tiene otra ventaja: ofrece una vida útil mínima de 40.000 horas, una equivalencia que supera holgadamente los cinco años de funcionamiento constante, mientras que los actuales fluorescentes poseen una vida útil aproximada que no supera las 20.000 horas, es decir, poco más de dos años.