El desarrollo de la inteligencia emocional contribuye significativamente a mejorar la productividad y el clima laboral. Los colaboradores con altos niveles de inteligencia emocional suelen ser más motivados, resilientes y capaces de manejar el estrés efectivamente. Esto se traduce en equipos de trabajo más integrados, reducción de conflictos interpersonales y una mayor disposición para colaborar en proyectos conjuntos.
Se parte de entender que la habilidad para reconocer, comprender y gestionar emociones propias y ajenas es crucial para enfrentar desafíos cotidianos, mantener relaciones interpersonales saludables y tomar decisiones estratégicas.
El curso requiere inscripción previa, dado que los cupos son limitados.
La propuesta arrancará el 25 de septiembre, y se dictará en la Casa de la Producción, Punto Digital, Emilio Senor 302
Por inscripciones o consultas, dirigirse a produccion@sanvicente.com.ar